viernes, 24 de agosto de 2007

¿Cuanto más habrá que aguantar???

El Coco no fue lo único que le rompieron los noruegos al Director Técnico argentino. Otra vez, la selección dio cátedra de vergüenza. Fue la gota que rebalso el vaso.

Los representantes de la albiceleste, estén bien o mal elegidos, son jugadores profesionales que por vestir nuestra gloriosa camiseta ganan muchos miles de dólares y, por lo general, llevan muchos paridos de primera a cuestas.

Teniendo en cuenta eso, es inadmisible la excusa de que es un combinado nuevo, que son jóvenes o que no se tiene el tiempo para que los jugadores se conozcan.

Con tan solo ver los encuentros cualquiera, hasta aquellos que creen que la pelota es cuadrada, se da cuenta de que la defensa esta más undida que el Titanic!.

El ratón Ayala fue muy criticado tras el gol en contra que cometió en la fianal de la Copa América frente a Brasil. Si bien es cierto que el tamaño del error no es comparable, todavía no resonaron las voces en contra del innecesario roce de Mascherano que terminó en el Penal que le dió la victoria al conjunto local.

Según Alfio Basile, la prueba de fuego van a ser las eliminatorias. Habría que comentarle un par de cositas al D.T.:


  • De seguir jugando así, Argentina no va a llegar siquiera al repechaje.

  • Si no cambia, va a convertirse en el próximo Lavolve, solo que a nivel selección. Ya que el actual sistema no le permite trabajar como pretende, debería amoldarse a lo establecido.

  • Hace 11 años que Argentina ganó el último mundial. Esperamos tener la chance en 2010. Claro, si clasificamos.

  • Para clasificar es necesario obtener puntos que se logran mediante la victoria de los sucesivos encuentros.

Según se los catalogó antes del encuentro, los noruegos son una selección clase "C". Es hora de olvidarse los laureles conseguidos antaño y caer en la dura realidad: hace más de 10 años que la albiceleste no tiene un logro a nivel mundial, más allá de la medalla de oro en las olimpíadas de Atenas, en 2004, de la mano del Loco Bielsa.


¿Tendrá que esperar ver el deslucido ¿juego? de la Selección en las Eliminatorias para darse cuenta de que las cosas así no van? o a partir de que los noruegos terminaron de romperle el Coco, ¿Basile pateará el tablero y comenzará a pensar una nueva selección, no de futbolistas sino de calidad en juego?.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Le pregunto a Basile: ¿de que sirve decir que más allá de la derrota el equipo le gustó si su conjunto no convence ni ilusiona para nada??????????